Indignante, fue el trato le dieron aquí
Con gran despliegue la prensa local anuncia el que dan en
llamar el super-concierto del sesquicentenario de Pereira Convivencia Rock
2013, el cual se realizará en el Parque Olaya Herrera los días 19, 20 y 21 de
julio próximo en su tercera versión, como eje central del Festival Internacional
Convivencia Rock y tendrá el apoyo de la Alcaldía por intermedio de la
Secretaría de Desarrollo Administrativo y el Instituto Municipal de Cultura y
Turismo de Pereira.
El diario La Tarde dedica toda una página a exaltar este
evento y la figura central es el destacado músico y compositor bogotano César
López a quien anuncian como la figura central del concierto y es famoso en Colombia porque los conciertos los da con su
escopetarra, un asombroso instrumento que construyó con un fusil inservible y
que pasea por Colombia y el mundo como un símbolo de paz a tal punto que la ONU
lo tiene en la nómina de Embajadores de buena voluntad y a quien le hacen allí
una amplia entrevista, al tiempo que reseñan toda la actividad que se está
desarrollando en la preparación de tan importante certamen musical.
El diario pereirano, en el informe que suscribe Yuliana
Arias Sánchez señala que desde ya se está convocando a las agrupaciones
locales, departamentales y regionales de los géneros y subgéneros como: rock,
metal, punk, hardcore, reggae, fusión, rap y hip hop, y tendencias
electrónicas, para que se inscriban y participen del festival musical. Por su
parte el director de Convivencia Rock Jorge Iván Arando declara allí: “”Este
año comenzamos la convocatoria el 17 de mayo y va hasta el 30 de mayo, la
invitación la hicimos a todos los artistas locales, pero además extensiva a los
regionales del norte del Valle y Tolima y a los pereiranos residentes en el
exterior”.
En el lanzamiento del concierto el viernes 17 de mayo en el
Teatro-Auditorio del Centro Cultural Lucy Tejada estuvieron varios artistas y
entre estos fue figura central César López, quien conmovió al público con sus
interpretaciones y su estilo que le ha dado tánta fama. Un bello gesto social, que él maneja con
propiedad, cuando saludó muy especialmente a un grupo de niños con problemas de
familia y de otra condición que, gracias a su gestión estaban allí y hasta los llamó por su nombre. La gráfica de Jorge Muñoz, Studio Sara Fotografía nos muestra a César en un momento de su presentación.
Pero todo esto
se vino a tierra con el indignante trato que recibió el artista de parte de los
organizadores del evento que ni lo recibieron ni lo despidieron como se debe a
un personaje de esta categoría, aparte de que el alojamiento dispuesto no era
el apropiado ni decoroso y mal ubicado, y ante esto se vió precisado a cambiar
de sitio y pagar de su cuenta el lugar donde se alojó, así como viajar en taxi
con sus implementos al aeropuerto, ya de regreso. Los niños a quienes les
expresó su amor durante el evento pudieron estar presentes porque los tutores por su cuenta pagaron los pasajes, que negaron
los organizadores no obstante haberse comprometido a ello. Estos y otros muchos
detalles de inelegancia y mala atención
para un artista de tal categoría que ha viajado por aproximadamente 60 paises
llevando su mensaje de paz y dando la buen imagen de Colombia, produjeron en
César López un sentimiento de decepción y de rencor hacia Pereira que lo llevaron
a decir que no volvería a esta ciudad. Así se lo manifestó a su gran amiga la
modelo, presentadora de eventos y entrevistadora Lady García Zúñiga, quien se
encontraba con él y le tocó presenciar esta bochornosa conducta de los
organizadores del evento en el que creyó sería tratado de acuerdo con su
categoría y trayectoria: “con este trato me están demostrando que así es como
consideran mi trabajo artístico y no vale la pena entonces estar en un lugar
donde a uno no lo valoran como debe ser”, le dijo a su amiga.
¿Volverá César
López, el de la escopetarra a Pereira?.
Lo dudamos, después del trato
indignante, indecoroso y humillante que recibió este inigualable artista
nacional, tan querido, admirado y respetado por los colombianos de bien.
Son
consecuencias de la actitud descomedida e inapropiada de unas personas que no
saben que con su conducta le hacen daño
a Pereira en el sesquicentenario.
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