En el limbo total anda ahora el tema de la revocatoria del alcalde de Bogotá Gustavo Petro, destituído e inhabilitado por el Procurador General de la Nación Alejandro Ordóñez.Desde el momento en que ser produjo el fallo de la Procuraduría Petro interpuso toda clase de recursos jurídicos para impedir en cumplimiento de esta determinación, y todo un festival de tutelas ante organismos judiciales, que han fallado a su favor algunas de ellas, al tiempo que ha movilizado a personas en concentraciones de la Plaza Bolívar de Bogotá, lo cual ha impedido todas luces que la sentencia de la Procuraduría en sus dos instancias, tras el recurso de reposición de Petro tenga cabal cumplimiento.
Desde antes de todo eso, el Senador Migue Gómez Martínez, hijo del exsenador Enrique Gómez Hurtado había radicado un proceso de revocatoria del mandato de Petro, al que este se opuso interponiendo también numerosos recursos.
Cuando se produjo lo de la Procuraduría el mismo Petro pareció cambiar de opinión frente a la revocatoria de su mandato y ha hecho hasta lo imposible para que esta se produzca.
La Registraduría del Estado Civil llegó hasta a fijar la fecha dfel 2 de marzo para la realización de esta elección atípica, pero inicialmente pidió al gobierno la suma de $56 mil millones como gasta electorales. Tras las conversaciones con el Ministerio de Hacienda la Regisraduría rebajó su pedido a $35 mil millones.
Ahora resulta que el Ministerio de Hacienda anuncia que solo hasta la semana entrante puede girar esa suma y la Registraduría dice que necesita de un mes hábil par poder realizar dicha elección, lo que imposibilita que el 2 de marzo se pueda llevar a cabo la misma.
O sea, Petro tiene embolatada hasta su propia revocatoria.
OSCAR HINCAPIÉ VELÁSQUEZ
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